por Sofía González | Jun 21, 2024 | NÚMERO UNO
La tía Irma insistió en exceso. Debió verme muy derrotada. Accedí y la acompañé a otra noche de bingo. Odio secretamente los juegos de mesa y la rugosa sensación de las fichas en mis dedos. La tía pasó por mí en su viejo Tesla color pastel y nos dirigimos al Bar...