BINGO 2313

BINGO 2313

La tía Irma insistió en exceso. Debió verme muy derrotada. Accedí y la acompañé a otra noche de bingo. Odio secretamente los juegos de mesa y la rugosa sensación de las fichas en mis dedos.  La tía pasó por mí en su viejo Tesla color pastel y nos dirigimos al Bar...